
A pesar del día lluvioso la comunidad se congregó para celebrar la fiesta de su patrono y reflexionar a la luz del Evangelio cómo vivir el carisma franciscano en estos tiempos.
Monseñor en su Homilía, nos regaló una ruta para guiar nuestro andar cristiano, insistiendo en que estamos creados a imágen y semejanza de Dios, que aunque nos cueste seguir la vida recta debemos esforzarnos y mirar a Jesús y la vida que nos propone nuestro santo patrono.
Animó el coro de la Iglesia Nuestra Señora de los Remedios, a quienes agradecemos tan delicado regalo.
Al concluir la Eucaristía, Monseñor rezó frente a la imagen y las reliquias de San Francisco de Asís.